Descripción del inmueble:
Enclavada en medio del paisaje mediterráneo, esta romántica finca de piedra natural se encuentra en una parcela de aprox. 22.407 metros cuadrados entre Santanyí y Campos. Lo que hace que esta finca sea tan especial es que dispone de una licencia de alquiler vacacional para 6 personas. En pocos minutos en coche se llega a la animada ciudad de Santanyí y al auténtico pueblo de Campos, así como a las bahías de color azul turquesa.
La finca ha sido renovada con gran atención al detalle. El resultado es una verdadera joya en medio del campo. Un largo camino de entrada con árboles naturales le conduce a la propiedad bien cuidada. La acogedora sala de estar con chimenea se encuentra en la planta baja de la finca. Un arco de madera le conduce al comedor contiguo con cocina totalmente equipada. Desde el salón se accede directamente a una gran terraza cubierta que invita a relajarse. Un agradable lugar a la sombra en verano. También hay un aseo de invitados en la planta baja.
Una escalera conduce al nivel superior de la finca. Pequeños detalles como el techo abovedado acentúan el carácter mallorquín. La planta superior alberga tres dormitorios dobles y dos baños, uno de ellos en suite. Desde dos de los dormitorios se puede disfrutar de maravillosas vistas hasta Campos y la Sierra de Tramuntana.
La zona exterior de la finca impresiona por sus numerosas terrazas, que ofrecen acogedores refugios. Una gran piscina invita a refrescarse. Numerosos árboles frutales como. Naranjas e higos proporcionan un toque mediterráneo. Una pequeña casa de invitados con un dormitorio completa el paquete.
Otras características incluyen aire acondicionado, calefacción por infrarrojos y una cochera.
Lugar & alrededores:
La ciudad rural de Campos, en el sureste de la isla, está situada a medio camino entre Llucmajor y Santanyí sin problemas de tráfico. Rodeada de extensas superficies agrícolas, ofrece muchos comercios para las necesidades diarias, restaurantes e instalaciones deportivas. De aquella ciudad de la Edad Media quedan actualmente sólo algunas torres, pues hoy en día Campos es una pequeña ciudad llena de vida que atrae numerosos visitantes especialmente en los días de mercado.
La famosa y larga playa de arena de Es Trenc con sus dunas y aguas color turquesa pertenece al municipio de Campos y ofrece diversión playera con un toque caribeño.
Al aeropuerto se llega en 25 minutos, la capital de la isla de Palma está a unos 35 km.